Apex City of Edinburgh Hotel

Una amiga y yo venimos de disfrutar cinco noches este mes de marzo de 2025 en este hotel y nuestra experiencia no ha podido ser más satisfactoria. La ubicación del hotel es excepcional, en plena plaza de Grassmarket, con vistas al castillo de Edimburgo y multitud de locales d hostelería y tiendas alrededor, al lado de Victoria Street y a dos minutos de la Royal Mile. Locales emblemáticos como The White Hart Inn, The Last Drop, Maggie Dicksons, Biddy Mulligans, Oink, Howies, Bertie´s, Greyfriars Bobby´s Bar, Deacon Brodies Tavern, El personal ha sido muy dispuesto y amable, tanto los recepcionistas como las chicas de la limpieza. La habitación estaba muy limpia. Nos dejaban toallas en abundancia. El baño perfecto, tenía bañera y también ducha, disponíamos de dispensadores a rebosar de gel, champú, acondicionador, crema corporal y jabón de manos de la marca neozelandesa Antipodes. En la habitación hay disponible secador potente, plancha y tabla de planchar. Teníamos hervidor de agua y diariamente nos dejaban (y reponían si usábamos) cacao en polvo, infusiones, café, azúcar y edulcorantes y galletitas de mantequilla. También había caja fuerte sin cargo y una mininevera. La wifi es gratuita y va bien. En la habitación también había una jarra de cristal por si queríamos ir a por agua purificada a los dispensadores que había en los pasillos. La calefacción funciona bien y se regula fácilmente, con lo que no pasamos ni frío ni calor. Fue simpático que nos dejaron un patito verde (Bobby) que es un símbolo de la cadena Apex y su función es ser llevado por los clientes a su casa. No percibimos ruidos ni exteriores ni interiores. El último día, desde que se deja la habitación y hasta que nos fuimos al aeropuerto, nos guardaron el equipaje en recepción. Volvería sin dudarlo pues es difícil de superar la impresión positiva que este hotel me causó y eso que últimamente he viajado bastante por distintas ciudades europeas.