Garlands Guest House

Acabamos de estar 2 noches alojados en Garlands.Es una casa antigua, bien mantenida, muy limpia. Sus dueños amables y serviciales. El dormitorio que nos toco, fue el 6, que queda en el subsuelo con ventanas que dan a la calle. Espacioso, impecable, con detalle de hervidora para hacer café y té con chocolates y galletas, que reponen diariamente, secador de pelo y plancha también. Cama grande, cómoda. Si tienes frio hay calefacción y la puedes regular. El baño muy limpio,con ducha, un poco chico comparado con el cuarto.Es luminoso, pero con un poco de olor a humedad y falta modernizar la decoración. (por eso le bajé un punto al review) Es un barrio tranquilo, así que no sentimos ruidos y dormimos muy bien. El desayuno es completo y riquisimo. Hay cereales, yogur, frutas, jugo de naranja, mermelada,manteca, tostadas y plato caliente que pueden ser huevos, panceta, salchicas etc preparado especialmete por Bill, uno de los dueños, y te lo trae él mismo vestido de chef. Realmente muy rico. Y la mesa puesta en el comedor y la música hacen que el desayuno sea relajante para empezar el día. La casa queda en un barrio tranquilo, a 20 minutos caminando del centro. Hay un ómnibus que te deja cruzando la calle, el 11. Y está a media cuadra de una avenida donde pasan ómnibus permanentemente. El boleto por trayecto sale 1,60 libras. A la vuelta hay lugares para comer y supermercados. Una buena opción para alojarte en Edimburgo si buscas algo tranquilo, para dormir y desayunar, incluso pudimos dejar las valijas luego del check out hasta la hora de partir.