Molo Uzeiga Inn

El hotel está ubicado a pocos cientos de metros de la playa, en un barrio tranquilo a las afueras de Klaipeda. Las habitaciones están dispuestas alrededor de un patio interior cerrado donde pueden aparcar sus coches. Esto proporciona una mayor seguridad, además de aislar, hasta cierto punto, del movimiento y ruido en el exterior. Los dueños son verdaderamente muy amables. Te reciben ellos mismos, viven dentro del recinto y se preocupan de que todo esté perfecto. ¡El nivel de limpieza es sencillamente espectacular!Las habitaciones son cómodas, confortables, bien planificadas, disponen de pequeñas cocinas (aunque sin fogones para cocinar), y tienen baños amplios, con duchas enormes a nivel de suelo (el bordillo tendrá unos 10 cm de alto, para la mampara), muy útiles para quienes sufran de movilidad reducida. (Vale la pena mencionar que nuestra habitación también estaba a pie de calle, con un bordillo mínimo antes de entrar). El hotel también dispone de su propio restaurante. Todo está decorado con un agradable estilo costero, con detalles marineros en cada rincón. En definitiva, un lugar muy, muy recomendable para pasar unas estupendas vacaciones y desconectar.