Edda

Alojamiento tipo hotel situado en Selva, uno de los pueblos ubicados en pleno centro de los dolomitas, lo que permite una adecuada exploración de este macizo, con grupos montañosos cercanos como el Grupo del Sella o Alpe di Siusi o el parque de Puez Odle. Nos alojamos durante dos noches. La habitación se ubica en las plantas superiores del alojamiento, mientras la planta baja tiene la zona de para desayunar y comer. Se puede acceder por ascensor facilitando la subida de equipajes. El personal, muy amable y que te ayuda en todo lo que le pidas, te entrega una tarjeta para aparcar el coche en las inmediaciones sin coste alguno, junto a una tarjeta que dan los alojamientos de la zona para ir en autobús público durante una semana. La habitación está decorada en madera con moqueta en el suelo. La decoración y mobiliario dan un aire romántico a la habitación. La cama es muy cómoda. El baño y la ducha funcionan a una temperatura y presión adecuadas. Tanto el nivel de limpieza como el silencio en nuestra habitación eran excelentes. Las vistas no eran muy allá ya que la montaña quedaba cerca, quizás las que dan a la carretera tengan peor ruido pero mejores vistas. El desayuno lo puedes elegir entre una amplia variedad de opciones, con distintos tipos de pan, embutidos, croissants, tipos de té. Nos encantó la calidad del desayuno El wifi funcionaba a ratos, siendo lo más flojo de la habitación, sin ser malo del todo. La relación calidad/precio fue excelente para la media de la zona. Repetiría sin duda, tanto por la calidad del apartamento como la belleza de la zona.