Settlers Beach Villa Hotel

Ésta fue nuestra segunda visita al Settlers y fue igual, si no mejor, que la que recordamos en 2004. Teníamos uno de los chalets de una sola planta que estaba muy bien equipado e intachablemente limpio (nuestra excelente criada Cheryl lo tenía así de pulcro). El personal, admirablemente dirigido por la nueva directora, Vanessa, era ejemplar- nada suponía un problema y algunos irritantes problemas con la cañería fue resuelto de forma profesional. Los anteriores comentarios en la página web relativo a la deteriorada que estaba parte de la decoración se han tenido muy en cuenta y se está llevando a cabo una restauración y recableado de los chalets. Las visitas matutinas de Vanessa con pasteles fueron un bonito detalle al igual que el esfuerzo por organizar una excursión por la isla y un picnic en la costa este; pasamos un día maravilloso. Comimos fuera todas las noches y el momento culminante fue la celebración de una ocasión especial en el “Tides” donde el servicio, la comida y el ambiente fueron verdaderamente algo excepcional. Con el cambio un 33% aproximadamente mejor que durante nuestra última visita quedamos gratamente sorprendidos de lo baratas que salían muchas comidas. El Mews, Spago y Ragamuffins merecen nuestra recomendación. Después de cenar a menudo íbamos al piano bar de Second Street donde las bebidas tenían un precio razonable y la animación era de primera categoría. Algo que no hay que perderse es la excursión al barco náufrago y estar entre tortugas a bordo del nuevo barco “Mark the Shark”. Esperamos volver.